Ayer
me compré la antología poética de Borges, una pequeña maravilla
en edición de bolsillo que ansiaba desde tiempos inmemoriales. Jorge
Luis, inabarcable, resumido por fin en un único tomo. Ni que decir
que ha sido un placer reencontrarme con sus versos, más de
quinientas páginas que sé que releeré con gusto y placer.
Sé
que este post es estúpido y carece completamente de razón y
significado, solo quería explicar porque elegí el nombre de Matilde
para mi protagonista, muchos de vosotros me lo habeis preguntado. Mi
primera opción era Victoria, pero la clara identificación me
atemorizaba. Pensé en Jeanne, una prostituta amante de Baudelaire, y
Susana, la razón de ser de Ángel González. Pero era muy típico
para aquellos que me conocéis, y a la hora de escribir, aunque
muchas veces no se puede, lo bueno es mantener cierta distancia. Y
busqué y rebusqué, y me encontré con Matilde Urbach, la
protagonista de Man with four Lives, de Joyce Cowen, a la que
Borges dedica un verso que llega al alma. Podéis imaginar
mi sorpresa cuando esta mañana abro mi nuevo ejemplar – tranquilo
papá, te devolveré mañana o pasado tus obras completas –
y me encuentro con esas mismas líneas: “Yo, que tantos hombres
he sido, no he sido nunca aquel en cuyo abrazo desfallecía Matilde
Urbach”.
Borges,
va por ti.
Pepita
Pérez
No hay comentarios:
Publicar un comentario